Corazón Chino

Cuando voy a Beijing, me gusta pasar por Tiananmen, la plaza más grande del mundo (casi un kilómetro de largo y medio de ancho, nada menos). Es realmente un sitio muy bonito, con las puertas de la ciudad prohibida al frente, el obelisco a los heroes del pueblo, el mausoleo de Mao, y algún otro monumento más.

Ultimamente también tiene cosas varias dedicadas a los juegos olímpicos, claro...


Suele haber siempre bastantes turistas, tanto extranjeros como chinos de fuera de Beijing, que vienen por razones varias a la capital, y hacen la visita obligada a lo que es el lugar más simbólico de la nueva China.


Por cierto, que antes también había muuuuchos vendedores persiguiendo extranjeros, para intentarte vender mapas, figuras, gorras de Mao, cuadros, agua, y un largo etcétera. Ahora, con motivo de los juegos, está controlado y se puede pasear mucho más tranquilamente. La verdad es que se agradece. Y es muy bonito ver un espacio tan amplio con tan poca gente (según a qué hora del dia, quitando a los vendedorespesaos quedan pocos turistas)

Es muy frecuente cuando estoy por ahi, que se me acerque algún turista Chino, que en su ciudad de origen no tiene ocasión de ver extranjeros, y me pida que nos saquemos una foto juntos. Es divertido, y cuando estuvo mi hermana conmigo nos sacamos al menos 5 o 6 (es lo que tiene ir con una chica guapa, la gente muestra más interés).

Pero no me esperaba, ni remotamente, lo que nos pasó en Guangzhou el dia de la antorcha...

Ese dia tuvimos que ir a solucionar unos papeles del visado de mi hermana, a la vuelta corrimos a intentar ver la antorcha, pero llegamos tarde por muy poco.


Así que nos metimos al metro, y antes de entrar un grupo de estudiantes muy majos se sacaron unas fotos con nosotros.


Muy divertido y emocionante, todos entusiasmados con lo de la antorcha, las olimpiadas y tal, mi hermana y yo incluidos, claro.


Así pues, entramos en el metro, y salimos en Tiyuxilu, el centro de Guangzhou (ese fue el error), y nos encontramos con que en el centro de guangzhou, con motivo de la llegada de la antorcha olímpica a la ciudad, hay reunidos unos 25 billones de personas (4 veces la poblacion de la tierra), y nosotros en medio.

Obviamente, no se puede volver a entrar al metro una vez que (tras mucho esfuerzo) hemos llegado fuera, ni tomar un bus o un taxi (las calles están llenas de gente, no hay coches... no cabrían), pero a lo hecho pecho, así que nos encaminamos a las puertas de un parque donde nos dice un chico que va a haber unas celebraciones.

Llegamos cerca de las puertas, y nos quedamos de pie, asombrados ante la inmensa cantidad de gente, y (yo al menos) disfrutando de la alegría y el buen rollo que se respira.

Y entonces sucede....

Se nos acercan dos chicas, y una de ellas pregunta (en inglés) si puede sacarse una foto con nosotros.

No hay problema, posamos y su amiga nos hace una foto con su cámara y otra con la mía.


Otro par de chicas que pasaban por ahí, ven que las primeras se están haciendo fotos con un par de extranjeros, y se acercan a preguntar si ellas también pueden.

Claro, no faltaba más.


Y después un par de chavales...

(observese que en esta foto cada uno miramos a un sitio, es porque había varias cámaras haciendo fotos a la vez... yo miro a la mia, claro)

Otros (muchos) grupos de gente joven que pasa por ahí ven que estamos haciendonos fotos con la pareja de chicas y los chavales, y se acercan también a sacarse ellos unas fotos.

Los que están más lejos ven que se está formando un corro de gente que se acerca a una zona concreta, y se acercan a curiosear, y cuando ven de qué se trata... también ellos quieren sacarse fotos con nosotros.

Y de pronto, nos encontramos totalmente rodeados de gente, apretandose contra nosotros para posar, o intentando acercarse (tarea nada facil en ese momento) y otros muchisimos sacando fotos como locos, hay flases en un circulo de 270º (y algunos también por detrás) hay tanta, tantísima gente sacando fotos que muchos tienen que esperar porque ni levantando la cámara pueden.

Es una reacción en cadena, y no es que en el centro de Guangzhou, en ese momento, ese dia, haya poca gente... así que la situación se alarga, se alarga y se alarga... y pasamos UNA MEDIA HORA (no se el tiempo exacto) envueltos en flashes y gente, y sin podernos creer lo que está pasando...

Al final no es que la situación se calmase, es que en un momento dado, no se muy bien como, logramos escapar. Tardamos mucho en asimilar lo que acababamos de vivir, jajaja...

Totalmente increible... ni que fueramos, yo que se, Bradd Pitt y Michelle Pfeiffer...

No tengo apenas fotos de la situación, primero por la dificultad de dar mi cámara a alguien en medio de la masa de gente apretados contra mi, y segundo por mi propia situación mental, de absoluta estupefacción, y que no me dejó reaccionar.

Toda una experiencia. :)